19.1 C
Asunción

Amenaza al pueblo Ayoreo por la deforestación en el Chaco

Published:

La comunidad indígena ayorea, en aislamiento voluntario, enfrenta una amenaza existencial que ha sido ignorada por muchos, pero que está alcanzando niveles de alarma de urgencia. En una entrevista con Diego Adamo, indigenista del territorio Tacana en Bolivia, se abordó la grave situación que viven los ayoreos en Paraguay y Bolivia, quienes se enfrentan a la destrucción de su hogar ancestral en el Chaco, una de las zonas más amenazadas por la deforestación masiva y las actividades agrícolas.

Un pueblo aislado en peligro

El pueblo ayoreo ha optado por vivir en aislamiento voluntario debido a la violencia histórica y el choque cultural que sufrió a manos de los colonizadores, quienes los forzaron a entrar en contacto con el mundo exterior. En ese contexto, muchos de los miembros de esta comunidad decidieron retirarse al fondo de los bosques, donde sus familias continúan viviendo de manera autónoma, cazando y recolectando.

Sin embargo, hoy en día, este modo de vida se encuentra en peligro debido a las acciones externas que invaden su territorio. «El pueblo ayoreo está viviendo una situación de aislamiento, pero con una extrema preocupación por la pérdida del bosque», explicó Adamo. La deforestación en la región, impulsada por la expansión de la industria agroextractivista, ha reducido considerablemente los territorios de estos pueblos.

El impacto de la deforestación

Uno de los problemas más graves que enfrenta el pueblo ayoreo es la destrucción de su entorno natural. El Chaco, que antes proveía de recursos esenciales como agua y alimentos, se está viendo reducido a una sombra de lo que era. La deforestación, facilitada por actividades como la plantación de soja transgénica y la ganadería, está afectando de manera directa el bienestar de las comunidades indígenas.

«Cuando una estancia desarrolla una industria agroextractivista, destruye el bosque, dejando todo como una mesa de billar, sin fauna, sin flora, sin vida», afirmó Adamo. Esta devastación no solo afecta a los animales que habitan la zona, sino que también elimina el acceso al agua y alimentos para los pueblos en aislamiento.

Un peligro invisible: Las enfermedades

El otro gran enemigo de los pueblos indígenas en aislamiento es la exposición a enfermedades atraídas por el contacto con el mundo exterior. A diferencia de las poblaciones no indígenas, los pueblos en aislamiento no tienen acceso a vacunas o tratamientos médicos modernos, lo que los hace extremadamente vulnerables a enfermedades.

La sociedad del Estado

Adamo también destacó la responsabilidad del Estado en esta situación. Según el indigenista, la deforestación y la violación de los derechos de los pueblos indígenas en aislamiento no solo son resultado de las actividades extractivas.

«El sistema de justicia ha procedido de manera irregular, favoreciendo la deforestación y violando derechos fundamentales como el derecho a un ambiente sano, a la cultura ya la autodeterminación de los pueblos», dijo Adamo. Ante esta situación, organizaciones internacionales y defensores de los derechos humanos han solicitado medidas urgentes para garantizar la supervivencia de los pueblos indígenas en aislamiento.

La llamada a la acción

El genocidio que afecta a los ayoreos y otros pueblos indígenas de la región no es un problema aislado. La situación es parte de un modelo de desarrollo agroextractivista que pone en riesgo tanto la vida de las comunidades indígenas como el equilibrio ecológico de la región. Adamo hace un llamado a la sociedad latinoamericana para que tome acción antes de que sea demasiado tarde.

«Estamos a la espera de medidas cautelares por parte de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, pero necesitamos una respuesta urgente. La pérdida de los bosques del Chaco, y con ella, la destrucción de las culturas indígenas», finalizó.

Escucha la nota completa:
Nota.

Artículos relacionados

Artículos recientes

spot_img