Uso del Índice de Precios al Consumidor para ajustar haberes jubilatorios: insuficiencia para reflejar la inflación real
El Congreso Nacional aprobó una nueva ley que modifica el cálculo de las jubilaciones del Instituto de Previsión Social (IPS). Esta ley extiende el periodo de cálculo de los últimos 3 años a los últimos 10 años de salarios para determinar el monto de la jubilación.
La medida ha generado un intenso debate. Por un lado, las autoridades argumentan que esta modificación es necesaria para modernizar y fortalecer el sistema previsional del país. Por otro lado, los jubilados y algunos expertos han expresado su preocupación, ya que consideran que esta extensión podría reducir significativamente el monto de las pensiones.
La ley entrará en vigencia en enero de 2025, una vez que sea promulgada por el presidente Santiago Peña.
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) se utilizará para ajustar los haberes jubilatorios, con un aumento del 3.4%. Sin embargo, este índice podría no reflejar la verdadera inflación, que es mucho mayor, lo que afectaría negativamente el valor real de las jubilaciones.
La nueva ley extiende el periodo de cálculo de jubilación de 3 a 10 años, utilizando el IPC para actualizar salarios antiguos. Esto puede resultar en valores subvalorados debido a la discrepancia entre el IPC oficial y la inflación real.
Según Pedro Halley, representante de la Unión Nacional de Jubilados del Paraguay (Unjpy) y ex gerente de Prestaciones Económicas de la previsional, esta ley regula el control de los fondos de pensiones y crea un Consejo Nacional de Seguridad Social. Sin embargo, existe preocupación por la influencia política en su composición y funcionamiento.
Señaló que el IPC actual no refleja el costo real de vida, ya que incluye artículos de lujo que no son representativos para la mayoría de la población, especialmente para los jubilados que gastan más en salud.
Sugirió incluir otros elementos económicos, como la tasa de rendimiento del dinero, para mejorar el modelo de actualización de haberes jubilatorios y reflejar mejor la realidad económica.
Destacó que la informalidad laboral afecta al sistema de pensiones, con solo un pequeño porcentaje de la población contribuyendo al IPS. Destacó la necesidad de aumentar la formalización laboral para mejorar el sistema.
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