El diputado opositor Billy Vaesken se mostró preocupado por la gestión del programa “Hambre Cero” y sus implicancias en el bienestar de los ciudadanos paraguayos, particularmente en las escuelas. En una entrevista reciente con la 1140 AM, Vaesken adelantó que se encuentra trabajando en una propuesta legislativa orientada a fiscalizar este programa, para apoyar a padres y docentes que quieran denunciar irregularidades en la distribución de recursos del programa.
El diputado expresó su malestar por el reciente escándalo generado en torno al conocido “picadito de cerdo con papa” servido en las escuelas. Según Vaesken, esta situación es un reflejo claro de la ineficacia del programa, que se encuentra bajo la administración centralizada por el Ministerio de Desarrollo Social (MDS), al cual le cuestionó no solo la falta de calidad en los alimentos entregados, sino también la falta de control en su distribución.
“Es una falta de respeto que se sirva un caldo de cerdo en vez de un plato adecuado para los estudiantes”, dijo Vaesken, quien considera que el Gobierno debe asumir responsabilidad ante los ciudadanos que financian estos programas con sus impuestos.
El diputado también cuestionó la falta de transparencia en la gestión del programa, mencionando que el Ministerio de Educación y Cultura (MEC) ha emitido una resolución que despoja a los directores de escuelas de su capacidad para hacer un control efectivo sobre los alimentos que se entregan. En su lugar, el protocolo de denuncia de irregularidades parece ser un mero formalismo, algo que, según el legislador, impide una fiscalización adecuada.
Destacó que el programa “Hambre Cero” tiene un impacto directo en la calidad de vida de las familias más necesitadas, y que es imperativo que los recursos sean manejados con la debida transparencia y eficacia. El trabajo legislativo que se propone buscará garantizar que el programa no se convierta en una nueva vía para la malversación.
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