El ministro de Defensa, Óscar González, anunció la apertura de un sumario contra dos militares del Comando de Operaciones de Defensa Interna (CODI) que fueron filmados bebiendo cerveza con sus uniformes. El video, que se viralizó en redes sociales, generó un fuerte repudio y obligó a las autoridades a tomar cartas en el asunto de manera inmediata.
Sanciones inmediatas y un mensaje contundente
González confirmó que tanto el capitán como la teniente involucrados en el incidente ya fueron cesados de su comisionamiento y tienen la orden de presentarse ante el comandante de las Fuerzas Militares. El ministro enfatizó que este tipo de faltas son una «oportunidad para demostrar que las Fuerzas Armadas son una institución seria y responsable».
«Vamos a tomar las medidas que correspondan en caso de que haya faltas en contra de la disciplina», declaró el ministro. La sanción que enfrentan los militares podría llegar hasta los 90 días de arresto, según lo estipulado en el código penal militar. Esta medida, según el ministro, no solo busca castigar la falta, sino también enviar un mensaje claro a otros miembros de la institución.
Sin denuncias previas, pero con un llamado a mayor control
Ante las preguntas sobre si existían denuncias previas de militares trabajando en estado de ebriedad, González aseguró que no tenían «ninguna información» al respecto. Sin embargo, reconoció que este incidente «nos debe obligar a aumentar el control y a bajar líneas concretas para que esto no vuelva a repetirse de ninguna manera».
El ministro contrastó la «vergüenza» que causaron estos dos militares con el «profesionalismo» de otros miembros de las Fuerzas Armadas. Como ejemplo, mencionó que en la madrugada de ese mismo día, personal militar acudió a apagar un incendio en la ruta Transchaco, demostrando que la institución también está al servicio de actividades humanitarias y no solo de operaciones contra el crimen.
