El proyecto de ley que busca regular la producción y comercialización del cannabis en Paraguay sigue avanzando en la Cámara de Senadores. La iniciativa, que se encuentra en estudio en la Comisión de Lucha contra el Narcotráfico, podría ser sometida a votación en el pleno durante el mes de marzo, tras la realización de una nueva audiencia pública.
Marcelo Demp, presidente de la Cámara de Cannabis, explicó que la propuesta apunta a una «legalización controlada» del cannabis y no a una liberación irrestricta. «Se pretende regular tanto la producción como la comercialización del cannabis con alto tenor de THC, asegurando a los productores un contrato de compra y un precio preestablecido», indicó.
Según detalló, la propuesta prevé que los agricultores puedan cultivar dos veces al año, generando ingresos significativamente mayores en comparación con otros rubros tradicionales. «Si lo comparamos con cultivos como el sésamo o la mandioca, el cannabis podría brindar a los productores una salida de la extrema pobreza», afirmó.
El proyecto también busca establecer un estricto control estatal sobre la producción y la comercialización del cannabis. Se prevé que la Dirección Nacional de Ingresos Tributarios (DENIT), junto con otras instituciones como la Senad y la Dinavisa, supervisen todo el proceso, con un impuesto selectivo al consumo del 18% para el uso adulto y del 5% para productos no psicoactivos.
Otro de los puntos destacados es el potencial mercado de exportación. «Países como Alemania, Suiza, Holanda, Estados Unidos y Canadá requieren cannabis de alta calidad para uso adulto», mencionó Marcelo. Además, se evalúa la posibilidad de que turistas brasileños puedan adquirir productos de manera legal en Paraguay, considerando que en su país ya está permitido el porte de hasta 40 gramos.
En cuanto a los aspectos educativos y de prevención, el entrevistado subrayó la necesidad de implementar campañas de concienciación. «Se debe trabajar en educación y comunicación, como se hizo con el alcohol. Es un proceso de largo plazo para que las personas comprendan el consumo responsable», señaló.
Finalmente, destacó el impacto económico y social que podría tener la regulación del cannabis en Paraguay. «Podemos reducir la criminalidad, generar ingresos para familias en situación de vulnerabilidad y fomentar una economía formalizada. Es una oportunidad para convertirnos en un referente regional», concluyó.
El debate sobre la legalización del cannabis en Paraguay continúa y se espera que las discusiones en el Senado definan el futuro de esta iniciativa en las próximas semanas.
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