Una comunidad religiosa en Itauguá ha estado en el centro de la atención debido a una serie de eventos recientes. La parroquia de Nuestra Señora Virgen del Rosario ha enfrentado una crisis significativa, con la desaparición de las joyas de la Virgen y problemas estructurales en el templo. Además, la comunidad ha estado trabajando para fortalecer su sentido de pertenencia y mejorar la situación económica de la parroquia.
Al respecto, la 1140 AM conversó con el párroco Pedro Brítez y este señaló que había asumido la administración de la parroquía hace unos dos años y que el conflicto viene desde entonces. Explicó que intenta administrar la parroquía según la forma en que la Iglesia lo pide.
«Puntualmente, la dficultad que se esta dando es con una de las capillas, que es una comunidad, ubicada en Itauguá Guazu», señaló
Mencionó que la comunidad lo señala de estar «recaudando» dinero en lugar de llevar a cabo la función religiosa, debido a una serie de aranceles puestos a los seminaristas. Señaló que esta fue la «gota que colmo el vaso».
«Se sumaron desobediencias anteriores, realizaron una fiesta de cumpleaños en el predio de la capilla que no corresponde, y sin permiso aún», añadió.
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