El presidente de la Asociación de Avicultores del Paraguay (Avipar), Néstor Zarza, instó a los productores a extremar los mecanismos de bioseguridad tras la confirmación de un nuevo foco de gripe aviar (H5N5) en la provincia de Buenos Aires, Argentina.
Zarza recordó que la influenza aviar llegó a la región hace más de dos años y medio y “lo hizo para quedarse”, por lo que considera imprescindible reforzar los controles sanitarios.
“La ciencia no tiene otra herramienta para luchar contra esta enfermedad más que un sistema fortalecido de bioseguridad. Cada establecimiento avícola es diferente y requiere un plan específico de prevención, basado en la responsabilidad y compromiso del productor”, señaló.
Impacto en el comercio y riesgo para la exportación
El titular de Avipar explicó que, si bien el brote detectado en Argentina no afecta directamente al Paraguay, podría tener repercusiones en la apertura de nuevos mercados. Actualmente, el país exporta entre el 3% y el 5% de su producción avícola a destinos en Asia y África, pero se encuentra en proceso de habilitación para mercados estratégicos como Taiwán.
“Si un país analiza habilitar su mercado, no considera a Paraguay de forma aislada, sino a la región en su conjunto. Por eso es vital que los focos se cierren rápidamente y no se generen nuevos casos”, advirtió.
Experiencias previas en Paraguay
En el 2022, Paraguay registró tres focos de gripe aviar en establecimientos particulares del Chaco. En aquella ocasión, el Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa) activó los protocolos correspondientes y logró contener la enfermedad antes de que alcanzara producciones comerciales.
Zarza insistió en que los productores, proveedores y todos los actores vinculados al sector deben entender que la prevención es clave:
“Un día podemos amanecer con un caso confirmado que cambie la historia de la avicultura nacional. No escatimemos esfuerzo ni inversión en bioseguridad”.
